Google se enfrenta a fuertes críticas por los criterios opacos que utiliza para decidir qué aplicaciones son compatibles con Android Auto, una plataforma que permite a los usuarios disfrutar de una experiencia personalizada en el coche. Este enfoque ha generado controversia, ya que se percibe como una forma de limitar la competencia y aprovechar su posición dominante en el mercado. Laila Medina, abogada del Tribunal de Justicia de la Unión Europea, considera que estas prácticas vulneran las normas de competencia. El caso más relevante ocurrió en 2021, cuando Google fue multada con 102 millones de euros en Italia por negar el acceso de JuicePass, una app de la distribuidora de electricidad Enel X, a Android Auto. JuicePass permite localizar puntos de recarga para vehículos eléctricos y gestionar suscripciones, funciones que también ofrece Google Maps, lo que ha alimentado las acusaciones de prácticas anticompetitivas. Al no permitir que JuicePass se integre con Android Auto, los usuarios deben recurrir a sus móviles en lugar del sistema de infoentretenimiento del coche. Google ha defendido su postura argumentando que sus decisiones se basan en la seguridad y la falta de plantillas específicas para apps como JuicePass, aunque ya existen aplicaciones similares que sí son compatibles. El caso está ahora en manos del Tribunal Europeo, que podría dictar sentencia en los próximos meses. La decisión final podría obligar a Google a ajustar sus criterios y abrir Android Auto a más aplicaciones de terceros.
Fuente: HTCMania