«La industria automovilística europea está experimentando una notable desaceleración en la demanda de vehículos eléctricos, lo que ha llevado a importantes fabricantes como Volkswagen y Mercedes a replantear sus estrategias. Volkswagen ha anunciado que está considerando detener la producción de su modelo Audi Q8 e-tron debido a la disminución global en los pedidos de vehículos eléctricos de lujo. Esta decisión está siendo evaluada en conjunto con sindicatos y el gobierno belga, dado que la planta de producción se encuentra en Bruselas. Mercedes, por su parte, ha informado de una caída del 23% en las ventas de vehículos eléctricos durante el segundo trimestre, lo que ha contribuido a una disminución general del 6% en sus ventas totales. La situación también ha afectado a Porsche, que ha decidido reducir la producción de su modelo Taycan en Alemania debido a las perspectivas de ventas a nivel mundial. Este fenómeno no se limita a Europa, ya que en Estados Unidos, General Motors y Ford también han anunciado recortes en sus planes de producción de vehículos eléctricos para 2024. GM ha reducido su previsión de producción en 50.000 unidades, mientras que Ford ha ajustado su producción de la camioneta F-150 debido a la menor demanda de lo esperado. A nivel global, la demanda de vehículos eléctricos sigue creciendo, pero a un ritmo más lento que en años anteriores. Según la Agencia Internacional de la Energía, se espera que se vendan alrededor de 17 millones de vehículos eléctricos en 2024, representando uno de cada cinco coches vendidos. Sin embargo, el crecimiento se ha desacelerado en comparación con años anteriores, lo que ha generado preocupación en la industria. Analistas de Goldman Sachs han señalado que la desaceleración se debe a diversos factores, incluyendo el aumento de los precios en el mercado de segunda mano, la incertidumbre económica y las tensiones políticas a nivel global. En Europa, la eliminación de subsidios a los vehículos eléctricos también ha afectado la demanda.»