El problema con el era de las redes sociales es que le ha dado anonimato a mucha gente. Este anonimato ha permitido a las personas publicar cosas en línea que nunca se habrían atrevido a decirle a otra persona en la vida real. El discurso de odio es un gran problema y empresas como X, Facebook e Instagram se han comprometido con la UE hacer más para abordarlo.
Compromiso de apoyo
Por el momento, los términos y condiciones de todas las plataformas de redes sociales prohíben a los usuarios publicar contenido considerado de odio. Sin embargo, esto no ha impedido que los usuarios lo hagan. No es difícil crear una cuenta nueva cuando una anterior ha sido baneada o suspendida.
De acuerdo a UE la comisaria de tecnología, Henna Virkkunen, “En Europa no hay lugar para el odio ilegal, ni fuera de línea ni en línea. Acojo con satisfacción el compromiso de las partes interesadas con un Código de conducta reforzado en virtud de la Ley de Servicios Digitales (DSA)”.
Para ello, empresas como Facebook, GoogleYouTube y X han firmado compromisos para hacer más al respecto. Este compromiso se llama “Código de conducta para combatir el discurso de odio ilegal en línea Plus”, una actualización de un código de 2016. Las empresas que firman el compromiso acuerdan permitir que organizaciones o entidades sin fines de lucro controlen cómo revisan los avisos de incitación al odio.
También les permitirá evaluar al menos dos tercios de estas notificaciones recibidas en un plazo de 24 horas. Las empresas también tendrán que implementar el uso de herramientas de detección automática, proporcionar datos sobre el alcance algorítmico orgánico del contenido ilegal y clasificar datos a nivel de país.
¿Será suficiente?
A pesar de esto, no podemos evitar la sensación de que el compromiso es pura palabrería. Queda por ver si esto realmente afectará el nivel del discurso de odio. Al final del día, depende de estas empresas abordar el problema y si quieren o no invertir más tiempo y recursos en él.
Muchas empresas también quieren lograr un equilibrio entre ser una plataforma segura sin ser demasiado estricta. Si demasiados usuarios abandonan su plataforma porque son demasiado estrictos, pierden dinero. Es realmente tan simple como eso.
Dicho esto, estas empresas podrían aprender un par de cosas de países como Corea del Sur y China. Estos países tienen una cosa en común: requieren que los usuarios usa sus nombres reales al registrarse para servicios en línea. Esto suele ir acompañado de una identificación vinculada al gobierno.
Esto significa que a estos usuarios les resulta más difícil esconderse detrás de un nombre falso. También facilita el seguimiento de comentarios o actividades hasta ellos.
Fuente: Android Headlines